miércoles, 9 de junio de 2021

Malestares

 

En la novela de Couto (115), este diálogo.


Justamente padre, porque es una niña debe aprender a dar puñetazos, mordiscos, patadas…

Esas no son palabras de un creyente. Aquí enseñamos a amar al prójimo.

De quien más hay que defenderse es precisamente de los más prójimos.


Freud (1930) planteaba otra cuestión. ¿Se puede amar a un desconocido tanto o más que a alguien de tu familia?



Referencias

Couto, Mia. La confesión de la leona. Alfaguara, 2016.

Freud, Sigmund. El malestar en la cultura. 1930. Alianza Editorial, 1970.